Vive despacio… para vivir.

El Evangelio ayer nos animaba a darnos tiempo, otro año más, para ver si da fruto, para abonar y cuidar, con confianza, con mimo…  tenemos tiempo, toda una vida para vivir, pero si no la vivimos despacio se nos va a escapar entre las manos. Tenemos la oportunidad, cada momento, de lograrlo.

RIRI2

Share Button