Un regalo para mi cansancio

MODALIDAD Automasaje                                                                              Evaluación Hara

MÚSICA  Francisco Tárrega – Recuerdos de la Alhambra

GUIÓN

Nos tomamos unos segundos para llegar a la postura básica. Es importante que al seguir los pasos nos encontremos en una posición que nos permita mantener la espalda recta, ya sea de pie o sentados de esta manera el automasaje será más efectivo, del mismo modo debemos concentrarnos en nuestra respiración procurando realizarla desde el vientre aspirando y espirando de manera suave y paralela al masajeado. Empecemos el «autoshiatsu» o masaje:

– En la base del cráneo:  Para realizarlo entrelazamos los dedos de nuestras manos por detrás de la cabeza. Localicemos con las yemas de los pulgares el borde inferior del hueso del cráneo, por detrás. Cogiendo así toda nuestra cabeza con ambas manos. Con la cabeza inclinada hacia atrás, ejerzamos presión suave con los pulgares, apretando en un punto y luego en otro, como si pulsáramos teclas,  mientras inhalamos y exhalamos descansemos unos segundos y volvamos a realizar.

– Masaje en la nuca:  Para realizar el autoshiatsu debemos masajear la zona de la nuca y los hombros frotando con ambas manos de manera y vigorosa y a la vez. Repitamos hasta que la molestia se haya aliviado y sintamos los músculos relajados.

– Masaje en los hombros: Este masaje, ideal para los hombros rígidos, se lleva a cabo “amasando” los músculos que van del cuello hacia el inicio del brazo, siempre utilizando la mano opuesta al lado que queremos masajear. Una vez que sintamos alivio en un hombro continuamos con el otro.

Anotamos

¿Reconoces algún cambio o efecto de este automasaje en ti? ¿Sueles notar enseguida el cansancio, la sobrecarga muscular, el dolor de cabeza, los nervios o sólo cuando estos síntomas son más fuertes? ¿Qué haces entonces?

 

Puedo sanar/te desde lo más profundo de mí

MODALIDAD  Visualización «La esfera»                                                      Evaluación Hara

MÚSICA  Claro de luna   Debussy

GUIÓN

Postura básica.

Sigue el recorrido del aire en tu respiración. Primero céntrate en  notar como entra por tus fosas nasales. Luego por lo más profundo e interior de tu nariz. Poco a poco quizá puedes llegar a sentir como atraviesa la zona anterior de tu boca hasta llegar a la garganta ya templado.

Siente este aire que te llena frío una y otra vez, para salir caliente.

Ahora imagina que todo el aire que vas expulsando va conteniéndose en un globo que crece a tu alrededor, se llega a formar una perfecta esfera transparente que te rodea. Obsérvala, tócala,… en ella te sientes cómodo y seguro.

Puedes imaginar cómo esta esfera y tu sentado en su interior se eleva y va recorriendo la clase, pasillos, patio…. Va a diferentes lugares que te son familiares. Se encuentra con otras esferas transparentes habitas por gente, personas que conoces porque cada día te toca convivir con ellas. Observa las esferas y los rostros. Con alguna parece que te rozas, chocas… otras parece que se deslizan junto a ti, conectan con tu ritmo… (pausa)

Poco a poco vuelves a tu lugar. Te paras y observas de nuevo tu esfera… descubres varios rayones e incluso alguna grieta. Te duele, agobia, preocupa… pero vuelves a caer en la cuenta de tu respiración. Siente tu respiración. Notas cómo de lo más profundo de ti sale un aliento de vida, suavemente soplas sobre cada grieta y vas curándola… Notas como llevas en ti una fuerza que te hace recuperarte, curarte… (pausa)

Incluso con tu aliento puedes llegar a acariciar otras esferas y sanar sus heridas. Soplas ese aliento sobre la esfera de compañeros que sientes que pueden necesitarlo. (pausa)

Sonríes al ver como tu esfera y las demás van recuperándose y vuelven a ser transparentes y brillantes.

Das gracias por ese aliento de vida que nace de lo más profundo de ti.

Anotamos

Me-note: Algo que he percibido como verdad profunda y no quiera olvidar.