¡¡ Abramos los ojos !!

Nosotros mismos, quizá sin darnos cuenta estamos siendo víctimas o… verdugos; nuestros amigos… quizá están haciendo daño o dejando que les hagan daño.

Un ejemplo es la incidencia de la violencia psicológica de control (si el agresor impide ver a los amigos o amigas, trata de evitar la relación con la familia, insiste en saber dónde se encuentra la mujer en cada momento, etc.). Una de cada cuatro jóvenes (16-17 años) asegura haberla padecido en los últimos 12 meses,

 

 

Share Button

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.