El santo de la semana: Martín de Porres

Martín nació en 1579 en Lima (Perú).
Era hijo de un español, Juan de Porres, y una joven de Panamá, Ana Velázquez.
Martín era mulato y eso le causó algunos problemas…
Era un niño generoso que ayudaba a los pobres con algunas monedas cuando su madre le mandaba a comprar comida para la casa. Muy joven comenzó a trabajar como barbero y dentista.
Cuando cumplió 15 años ingresó en el convento de los dominicos en Lima. Como era pobre lo aceptaron como hermano para los trabajos. Se dedicaba, especialmente a barrer, por lo que se le conoce como «Fray escoba».
Un día un compañero dominico le preguntó: “Martín, ¿qué harías si Jesús volviera a la tierra y viniera a vernos?”.
Martín respondió con sencillez: “Seguiría barriendo”.
Martín ejerció durante mucho tiempo el trabajo de enfermero en el convento y hacía muchas curaciones milagrosas. En su convento también acogía a muchos los enfermos y personas sin hogar de la ciudad y con su ayuda se fundaron asilos para los niños y niñas huérfanos.
Martín murió el 3 de noviembre de 1639, por eso hoy se celebra su fiesta.

ORACIÓN

Amigo Jesús,
gracias por el buen ejemplo
que nos han dejado tantos santos, como Martín de Porres.
Nosotros también queremos ser santos como ellos.
Ayúdanos a hacer bien nuestras tareas y responsabilidades
y a preocuparnos por las personas más necesitadas
como hacía Martín para parecernos más a Jesús. Amén