Hay un gesto que hizo Jesús en la Última Cena que es muy importante.
Lo recordaremos mañana, Jueves Santo.
Jesús se quitó el manto y se puso una toalla en la cintura.
Después tomó una jarra con agua y una palangana y se puso a lavar los pies a sus discípulos.
Ellos no lo entendieron, porque en aquella cultura y en la época de Jesús, eran los esclavos los que lavaban los pies a sus señores…
Pero después los discípulos lo entendieron: Jesús les pedía ser servidores, cuidar a los que más lo necesitan, acercarse a los más pobres, cuidar a los que nadie cuida, querer a los que nadie quiere…
Vemos en este vídeo ese momento tan importante para Jesús y para todos los que queremos seguirle…