Jesús, en el Evangelio de este domingo, nos cuenta una parábola.
Habla de un fariseo. Los fariseos eran cumplidores de la ley y se creían superiores a los demás.
También de un publicano. Los publicanos eran personas mal vistas porque cobraban impuestos y estafaban a la gente.
¿A quién mira Dios con más cariño?