Nadie te ama como yo

Mientras comían, Jesús tomó un pan, pronunció la bendición, lo partió y se lo dio, diciendo:
– Tomad, esto es mi cuerpo.
Cogiendo una copa, pronunció la acción de gracias, se la dio y todos bebieron.
Y les dijo:
– Ésta es mi sangre, sangre de la alianza, derramada por todos. Mc 14

 1-3 Primaria

4-6 Primaria

Nadie te ama como yo…